Las historias son FICTICIAS. Cualquier similitud con la realidad es pura coincidencia.
No se publican finales sin el concentimiento del autor de la historia original.

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lunes, 10 de diciembre de 2012

Comienzo del Final 2


Cuenta Esteban

Estaba preso, ya hacía meses que no paraba de pensar en ellas, mi hija, Pau. Y con sus hermosos rostros el de Él. El infeliz que me las había robado, me jure a mi mismo reconquistarlas y eso iba a hacer. Llevaba siempre conmigo un papelito que iba a dejar en el hipotético caso que no pudiera  llevarme a Pau al mismo tiempo que a Amparo, la nena siempre fue un blanco mucho más débil y fácil pero con el estúpido del novio, la madre era un blanco aun más difícil, necesitaba a las dos por eso quería que Pau me encontrara también, lo llevaba siempre con migo, como cábala era solo una frase, Paula sabría donde encontrarme “No sos nadie, vine a buscar lo que es mío. Firmado: Esteban”.

Una noche me sentí muy mal, me descompuse y terminé desmayado en el gimnasio y golpeado por todos los otros reclusos que viéndome débil aprovecharon para vengarse de mí. Ilusos pensé… yo próximamente iba a estar afuera, sus golpes me iba a llevar a un solo lugar. EL HOSPITAL, lugar perfecto, un solo guardia y todo el tiempo del mundo para poder escaparme y recuperar lo que era mío.

Llegue a la guardia del hospital y de reojo vi una carita conocida. Sí, era ella, Amparo, mi hija a la que tanto tiempo había esperado y con ella el infeliz que me las había robado hablando con un médico, de espaldas a Amparo. Grave error. Ni lo dude, aproveche un descuido del guardia y sigilosamente fui hacia la nena, la levante tiernamente en brazos y deje en el piso mi papelito. Ella se despertó, intento gritar pero le puse rápidamente la mano en la boca y sabía que tenía que callar. Nos fuimos, a lo que antes era mi casa [NdeR*: si chorro y boludo, obviamente ese el lugar donde vas ultimo pero bue…]. Senté a Ampi en la cama y trate de tranquilizarla, su cara de susto me mataba lentamente.

Esteban: Amparito vos sabes quién soy yo?
Amparo asintió tímidamente con la cabeza y dijo: Ti. Sos mi papá malo…
Esteban: como papá malo? Quien te dijo esas mentiras? Yo soy tu papá, el único que tenes, el que ama a vos y a tu mamita. Ya muy prontito vamos a estar los tres juntitos como antes, solo nosotros tres, querés?
Ampi: (negando con la cabeza) yo ya tengo a mi papá papi que me cuida y a mi hermanita. A vos no te quiero.
Esteban: (violentándose y agarrando a la nena del brazo) vos no entendés que yo soy tu papá? Que el otro es un impostor? Que no las quiere? Ya pronto vamos a estar los tres como antes y vas a ser muy feliz. Vamos a ser muy felices los tres como antes, entendiste???  Bueno ahora te voy a hacer una leche, vas a desayunar y después va a venir mamá con nosotros, si?? (Esteban sabia que Pau sabría donde encontrarlos y que por miedo iba a venir sola, pero necesitaba tranquilidad así q tome unos somníferos [ponele q le dio medio rivotril, encima q fármaco me cuesta, ajustar dosis a pediátricos de antipsicoticos y q no los mates, es como too much para mi cerebro]  del botiquín y se los coloque en la chocolatada de Amparo).
Amparo tímidamente tomo la chocolatada y comenzó a beberla. Al poco tiempo ya estaba nuevamente dormida.

continuará...

***

Agradecemos los comentarios
Tati y Sofi
@CaspercitadePyP

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